Tribulete 21
[Piensa global, actúa local] © Gloria Serrano Fue el martes 11 de abril, por la tarde. Ese día, desde temprano, noté las frases en color rosa que aparecieron pintadas en las paredes de distintos establecimientos: en el bar de sushi que apenas abrió, en el bar de tapas veganas que abrió hace unos meses, en el apretujado bar de siempre, en el mercado San Fernando, junto al callejón: “Ella no está sola” , “Si tocan a una, respondemos todas” . © Gloria Serrano Al mediodía bajé para hacer un par de fotos. Supe, después, que sería una concentración para evidenciar la violencia machista. Pero no en general, sino la violencia machista en Lavapiés, en este barrio que siento tan mío sin tener siquiera un metro cuadrado, el barrio que camino todos los días con el mismo orgullo de Arturo Barea cuando, en La forja de un rebelde , explica de dónde viene el resonar de «el Avapiés» en su vida. O que Gloria Fuertes al decir “cambio Quinta Avenida por calle Tribul...