Cuida tus alas: Memoria de la gráfica urbana feminista en Madrid

Calle Jesús y María, Lavapiés, Madrid. © G. Serrano, 2017

Fotogalería

“La dominación masculina está tan anclada en nuestro inconsciente que ya no la percibimos, por lo que tenemos dificultad en cuestionarla”. Pierre Bourdieu

A ti que optas por una vida diferente, no convencional, la tuya.
A ti que marchas con otras, junto a otras y por otras.
A ti que no titubeas en decir: “No, así no quiero”.
A ti, la Virginia Wolf contemporánea que dice exactamente lo que piensa.
A ti, la hermana de Shakespeare en cualquier barrio en busca de sus 500 libras.
A ti que te expresas con música, con poesía, con danza, con el color del cabello, con un tatuaje.
A ti que no sientes pena mostrando tu cuerpo ni te amargas porque no es "de revista".
A ti que te enfrentas al patriarcado en un autobús, en una sala de redacción, en un restaurante, en la academia, en la calle.
A ti, a quien llaman "histérica" y te mantienes firme, en pie, con la frente en alto.
A ti que no aceptas el chantaje de tu padre, de tu pareja, del profesor, del jefe.
A ti que te sabes inteligente y capaz. Y lo demuestras.
A ti que detectas el comentario sutil, casi que "inocente", pero misógino.

Y también...

A ti que te resulta difícil “adaptarte”.
A ti que te percibes impotente, incapaz, derrotada, etiquetada, disminuida.
A ti, a la que aíslan física, intelectual o emocionalmente.
A ti, a la que niegan el empleo porque estás embarazada, porque "no tienes el perfil para el puesto", porque ya superas los cuarenta, porque tus conocimientos despiertan temores.
A ti, a la que no reconocen como persona ni el valor de tus aportes ni la legitimidad de tus derechos.
A ti, a la que acusan, desautorizan o inferiorizan delante de otros, contantemente.
A ti, a la que a diario expolian su pensamiento, su tiempo, su espacio.
A ti que naturalizas, que normalizas la asimetría, la desigualdad de género.
A ti que cedes ante los prejuicios de la sociedad.
A ti que vives con miedo y en silencio.
A ti que celebras el chiste o la bulla machista.
A ti que no has descubierto la vigencia de la esclavitud más antigua del mundo.
A ti que no adviertes en estas situaciones un maltrato a tu dignidad; en conductas que llamamos "micromachismos" (es decir, microabusos, microviolencias que terminan en los golpes o con la muerte).

A la que todavía hoy, en 2017, para caminar por su ciudad, para trabajar, para tener sexo, para vivir debe alzar la voz y permanecer a la defensiva y salir al mundo jugando con astucia, a la ofensiva. A ti que lees esto y piensas que exagero.

Y a la que desconoce lo que pasa en el barrio de Lavapiés, en Madrid, o en el centro comercial Santafé, en Bogotá, o en las calles de Puebla. En Latinoamérica y en Europa. En cualquier lugar y a cualquier mujer. A todas, a cada una le digo o, más bien, le pido: "Cuida tus alas, hermana". Piensa, ata a tu memoria estas palabras de Helene Cixous:

"¡Suéltate! ¡Suelta todo! ¡Pierde todo! Toma aire. Hazte mar adentro. Hazte de la letra. Escucha: nada ha sido hallado. Nada se ha perdido. Todo está para buscarlo. Anda, vuela, nada, salta, corre, cruza, ama lo desconocido, ama lo incierto, ama lo que aún no fue visto, ama a nadie, que tú eres, que serás, déjate, libérate de las viejas mentiras,atrévete a lo que no te atreves, ahí es donde gozarás, haz siempre tu aquí de un allí, y alégrate, alégrate del terror, síguelo por donde tienes miedo de ir, lánzate, ¡es por ahí! Escucha: no le debes nada al pasado, no le debes nada a la ley. Gana tu libertad: devuelve todo, vomita todo, dalo todo. Dalo absolutamente todo, óyeme, todo, da tus bienes, ¿de acuerdo? No te guardes nada, aquello que te importa, dalo, ¿entiendes? Búscate, busca el yo, revuelto, numeroso, que serás siempre más adelante, y fuera de un sí, sal, sal del viejo cuerpo, libérate de la Ley. Déjala caer con todo su peso, y tú, corre, no mires atrás: no vale la pena, detrás de ti no hay nada, todo está por llegar".

¡Suéltate! ¡Suelta todo!

Gráfica urbana del feminismo en Madrid:

La gráfica urbana es una forma de comunicación y diseño presente en nuestra vida cotidiana que se integra al paisaje —o se apropia— de las ciudades en cualquier parte del mundo. Son elementos gráficos, imágenes, letras, colores, signos que se ubican en paredes, vallas y otros espacios murales para expresar reivindicaciones y protestas sociales o colectivas de diversa naturaleza. Las más de las veces, esta gráfica trasciende su sentido meramente informativo para crear todo un lenguaje simbólico, convirtiéndose, en su conjunto, en un repertorio comunicacional y un dispositivo sociocultural que refleja el pensamiento y sentir de distintos grupos o sectores de la población en determinado contexto.

En su estética, la gráfica se presenta como una fuente infinita de recursos tipográficos, artísticos e ilustrativos: dibujos, logotipos, caricaturas, representaciones de objetos. Algunos originales, otros con reminiscencias de momentos o luchas anteriores, otros más llegados de fuera y adoptados como parte del modelo globalizador. También en contra de ese mismo modelo y a menudo basado en el humor, la sátira y la ironía para exteriorizar una crítica social. Casi siempre alternando con el grafiti.

[Lee el reportaje Gráfica feminista: En el muro de la memoria de la periodista Ana de Blas]

Las siguientes, son fotografías recopiladas durante 2016 y 2017 como una mínima muestra de la "Gráfica urbana del feminismo en Madrid". Un trabajo de exploración y documentación —en proceso— para visibilizar la movilización social en torno a la violencia de género: