Entrevista realizada por Natividad Jiménez López y Gloria Serrano para NHU, el períódico del barrio de Lavapiés, en Madrid. Para conocernos y reconocernos, para eso estamos aquí. Y como en buena charla de café —o mejor, de bares y copas— hablamos un poco de todo: sus inicios en el ámbito del espectáculo y la imitación, la vida en Lavapiés con sus verbenas populares; de sus gustos y disgustos, su transexualidad y sus afanes. Ella es Milana Rocío, “Emy”, quien nos abrió su ventana personal desde la que mira alrededor. Digamos que, sencillamente, una vecina del barrio que dice ser “ante todo, una madrileña, gata, gata”. ¿Cómo te presentas, quién eres, qué haces? Si nos puedes contar… R. En realidad, no me tengo que presentar porque he nacido aquí. Mis abuelos vivían en la calle del Oso número once, yo era un bebé y ya veníamos con mis padres a verlos todas las semanas. Y luego, hace treinta y cinco años, cogí la casa en el número seis. O sea, que me conocen desde que nací...